Manuel Belgrano: pensar y actuar en favor de sus hermanos

Ciencias Sociales y Humanas
16 junio, 2022

Manuel Belgrano: pensar y actuar en favor de sus hermanos

El deceso de Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano, había pasado desapercibido por los vaivenes políticos: por un lado, el sostenimiento de las operaciones militares requeridas para la emancipación de España, por otro lado, las desgarradoras luchas internas con el fin de establecer un sistema político luego de la Independencia. El periódico Argos, recién en 1821, daba cuenta de la notica: “El día 20 del presente mes de junio, a las siete y media de la mañana de este día hizo un año que perdió Buenos Aires a su más virtuoso y obediente hijo, el brigadier general D. Manuel Belgrano”. Nacido en Buenos Aires, un 3 de junio de 1770, en la actual Av. Belgrano 430, pensó y actúo una patria en una época caracterizada por el cambio y el conflicto, tanto como funcionario del régimen colonial y precursor ideológico, protagonista, gestor de la Revolución de Mayo, o bien, como eminente conductor militar en las guerras independencia americana. Al decir de Bartolomé Mitre, la concepción y ejecución de la batalla de Tucumán, el 24 de septiembre de 1812, salvó la libertad de América.

Ese pensar y hacer tuvo consecuencias en un amplio espectro de la vida social. Su impronta, se hizo sentir en el ámbito de la economía, comercio, periodismo, campañas militares, construcción del estado, educación, comercio, agricultura, navegación, artes y ciencia. Defensor de la situación de la mujer y de dignidad del aborigen.

Belgrano defendió también tanto la educación básica como la especializada y técnica, conducente al trabajo y a la producción. La transformó al plantear la importancia de la formación de la mujer y la obligatoriedad para que los padres enviaran a sus hijos a la escuela. Fundó las escuelas de Dibujo y de Náutica. Como vocal de la Primera Junta, creó la Academia de Matemáticas, cuya misión principal fue formar militares y cadetes. La Asamblea Constituyente lo premió con 40.000 pesos por los triunfos en las batallas de Tucumán y Salta, que donó para la fundación de cuatro escuelas, a erigirse en Tarija, Jujuy, Tucumán y Santiago del Estero.

Asimismo, sostuvo una visión sobre la importancia del capital simbólico en la construcción de un Estado sustentable. En ese sentido, propone la adopción de la escarapela, enarbola la bandera argentina, defiende su creación y la hace jurar, además de sustentar ideas que reforzaban el concepto de autoridad y poder, acorde a lo internalizado en los habitantes de la ex – colonia española. De profundo sentimiento democrático y republicano, aunque prefiera iniciar el recorrido desde la monarquía, con una perspectiva política muy por encima de lo habitual. Sus rasgos de desinterés dan muestras que la virtud ni los talentos tienen precio. Muere aquí en la más humilde dignidad, habiendo dado todo por la Patria.

 

Dr. José Luis Speroni

Facultad de Ciencias Sociales y Humanas